Tu no decides cuando necesitas a alguien, simplemente llega un momento en que te das cuenta que no sabes que hacer si esa persona no esta. Necesitas su perfecta sonrisa, sus manos y sus caricias, necesitas tenerlo encima, su cuerpo pegado al tuyo, necesitas sus labios y sus besos, sus ojos y sus miradas, sus abrazos, su voz, sus palabras, su cariño y su dulzura. Simplemente le necesitas.
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